Si quisiésemos plasmar un concepto, si se quiere, algo sencillo y elemental de lo que es el concepto de marketing, mercadeo o mercadotecnia, diríamos que se trata de una disciplina (¿será una ciencia?) que analiza el comportamiento de los mercados y de los consumidores.
Mediante el análisis de la gestión comercial, se pretende fidelizar y retener los clientes, con base en la satisfacción de sus necesidades, prioridades y gustos. El Marketing Mix es una de las modalidades más interesantes del mercadeo, en general.
En qué consiste el “Mix Marketing”
Hablar de “Mix Marketing”, es lo mismo que hablar de “mezcla de mercadotecnia”, al tiempo que se trata de un concepto que se usa para hacer mención del conjunto de herramientas y variables de los que dispone el responsable del marketing en una organización, para cumplir con los objetivos de la entidad.
En otras palabras, el Marketing Mix está conformado por la totalidad de las estrategias de marketing que sirven para trabajar con las conocidas “cuatro P”, esto es, producto, precio, plaza y promoción.
Al momento de centrarse en este conjunto de las cuatro variables citadas, el responsable (al que hacíamos mención) deberá tener en cuenta una serie de factores, de cara alcanzar los resultados pretendidos.
En lo que tiene que ver, específicamente, con el precio del producto o del servicio (según sea el caso), se deberán tener en consideración los precios que ofrecen las empresas similares que se encuentran en el mismo mercado.
Lo anterior, con el fin de detectar cuál es el precio más competitivo y, de paso, adoptarlo casi que como el más importante de los atractivos, para “atrapar” y/o fidelizar (retener) al consumidor.
La distribución del producto o servicio dentro del Marketing Mix. Otros aspectos
En lo que tiene que ver, esta vez, con la distribución del producto o del servicio (en el sentido estricto y técnico, los servicios también se “distribuyen”), digamos que, igualmente, es fundamental dentro de la cadena ininterrumpida de acciones tendientes a obtener los resultados pretendidos.
Así las cosas, habrá que tener en cuenta aspectos tales como el almacenaje (en el caso de los productos, mas no de los servicios, por supuesto), la relación que existe con los intermediarios y las áreas en las que están ubicados los diferentes puntos de venta.
Además, se deberá prestar especial atención a una variedad de factores que están relacionados, directamente, con el producto o el servicio, como es el caso de la garantía y el servicio de atención al cliente durante y en la etapa de la post-venta.
El cuarto aspecto fundamental del “Mix Marketing”, es el de la promoción, que es una fase trascendental (como lo son las cuatro) para dar a conocer el producto o el servicio, con la finalidad de que sea identificable en el mercado y, de paso, que sea capaz de generar demanda por parte de los consumidores finales.
Para tal efecto, es imprescindible generar estrategias y acciones en materia de publicidad, de relaciones públicas y de “merchandising”.
El Marketing Mix debe propender por la conservación de la coherencia entre los cuatro elemento fundamentales, a los que hicimos relación anteriormente. Ello, por cuanto, por ejemplo, sería un despropósito posicionar un producto/servicio en un sector de lujo para, luego, tratar de competir con un precio demasiado accesible (bajo)
